La basura está de moda

Es el principal modo operandi de políticos, sindicalistas, redactores, periodistas, locutores, dirigentes, policías, conductores, médicos, ... hacer de sus profesiones un estercolero, un basurero, sus procedimientos, sus falta de escrúpulos les han llevado a la mayoría a estar dónde están sin valorar lo que tienen, por eso se manifiestan a diario como gente sin valores y siempre de cara a la galería. Tienen alergia al trabajo, se aprovechan del prójimo, mañana nos tocará a nosotros ser sus víctimas de nuevo, pero de vez en cuando alguien ingenuo sale para darnos esperanzas, suelen salir de zonas deprimidas, de estamentos bajos, donde su trabajo resulta más laborioso pero a la vez dignificante.
La falta de calidad en la sociedad se ve cada día, nos ofrecen cada vez productos peor acabados con la última tecnología, y no es que las máquinas no sepan hacerlo bien, lo que ocurre es que al mando de esas máquinas nos encontramos gente nada cualificada, cualquiera puede pulsar una tecla, pero en el orden correcto y a la velocidad deseada muy pocos, así tendremos a estos politicuchos, sindicalistos, caciques, chucopteros, especuladores, de tres al cuarto.
Profesionales faltán en todos los sectores, la mano de obra cualificada brilla por su ausencia, y las empresas cada vez invierten menos y mal en formación, pues ya los mismos formadores vienen con defectos, no se buscan resultados, lo importante es demostrar haber empleado el tiempo en formar a la gente sin cumplir unos objetivos, la calidad en el trabajo no es remunerada, da igual como se haga el trabajo, fuimos mano de obra no cualificada cuando emigramos al extranjero y ahora somos destino de mano de obra no cualificada en todos los sentidos, desde quienes nos dirigen hasta quienes trabajamos en este país. El trabajo se ha convertido en una necesidad que nos hipoteca toda la vida, nuestra vida para poderla llevar a cabo nos obliga a hipotecarnos con otras personas, con los bienes de consumo habituales, nos crean necesidades, y el resultado es que nos obligan a trabajar en lo que podamos y da igual de las condiciones, si nos gusta o no, por eso cada vez es más dificil encontrar a nadie que te sepa vender algo, que te sepa informar, que demuestre generosidad, cariño, simpatía, complicidad, respeto. No sabemos transmitir nuestros conocimientos, nuestras inquietudes, nuestra educación, cada vez somos más agresivos, irrespetuosos, etc. entre compañeros, entre ciudadanos, entre amigos.